Me levanté temprano para estar a las 07:00 am en la estación de ferrocarriles de Riobamba para abordar el tren o autocarril con destino a Alausí, que pasaría por "La nariz del diablo", una vieja ruta trazada en roca sobre el abismo que tiene un mágico encanto para los visitantes, ya que el tren sube y baja en zigzag para cruzar el río Chanchán y seguir rumbo a parajes más altos de la cordillera de los Andes.
Hacía mucho frío, asi que unos cafés en la calle me vinieron muy bien a esa hora.
A las 07:00 de la mañana salieron los trenes con destino a Alausí y a las 07:30 hrs., partiríamos nosotros, pero al pasar los minutos nos avisaron que la lluvia del día anterior causó un derrumbe de un cerro y con ello la obstrucción de las vías férreas, con lo cual el viaje sería imposible.
Estuvimos esperando, sin podernos resignar, cerca de una hora, pero no pasó nada y comenzaron a devolver el dinero de los boletos; ya a esa hora no había nada más que hacer, sólo volver a Baños.
Luego de retirar mis cosas del hostal, tomé un taxi al terminal de buses de Riobamba y justo en ese momento el bus a Baños estaba saliendo, así es que aproveché y me fui inmediatamente.
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